A partir de la quinta película de la saga, el tono que adquiere el universo se vuelve mucho más tenebroso y palpitante, dado que la historia avanza con la adultez de sus personajes y sus responsabilidades. He aquí los mejores momentos.
HARRY POTTER Y LA ORDEN DEL FÉNIX
El Ejército de Dumbledore
Podríamos clasificar esta escena como el verdadero comienzo de la etapa adulta de muchos de los personajes. Saben que algo serio está comenzando a ocurrir y no están dispuestos a quedarse de brazos cruzados, así que Harry les echa un cable con “Defensa contra las Artes Oscuras”. Vuelven a “lo prohibido” por una buena causa.
Huida de Fred y George
Ni los Malfoy, ni los mortífagos, ni Voldemort. Sin duda, el personaje más odiado y odioso es Dolores Umbridge (peor que un dolor de muelas). Así que, esta escena es de las más divertidas y reconfortantes de la película. ¡TODO UN ESPECTÁCULO! Ojalá ser Fred y George, ¿verdad?
Lucha en el Ministerio
Este momento pone la piel de gallina. Ver a la Orden del Fénix unida, luchando contra los mortífagos es evidentemente algo que no podríamos pasar por alto, haciendo especial hincapié en ese “Yo maté a Sirius Black” que a más de uno nos hace soltar unas cuantas lágrimas. Pero no solo ese momento, sino que, además, el duelo Dumbledore-Voldemort es insuperable.
HARRY POTTER Y EL MISTERIO DEL PRÍNCIPE
Ataque a “La Madriguera”
La casa de los Weasley también es nuestra casa, y es que es imposible no sentirse parte de esta familia tan entrañable. Por eso, en esta escena, el dolor de la destrucción que se refleja en los ojos de los personajes es tan atroz que es inútil no sentirse empático. Aunque, no obstante, es grandioso.
Felix Felicis
No es nada visualmente espectacular, pero es irrebatible que el guion es tremendo, por no hablar de la interpretación de Daniel Radcliffe, que parece que vaya hasta arriba de “felicidad”. Una escena que todo potterhead que se precie recuerda y representa, porque es para hartarse a reír.
La cueva del Horrocrux
Aquí es donde la cosa se pone seria y averiguamos que Voldemort es más inteligente (si cabe) de lo que parece, habiendo repartido su alma en 7 objetos. Dumbledore y Harry se ven envueltos en una de las escenas más crudas y difíciles de toda la película (sin contar lo que viene después). Sencillamente espectacular.
HARRY POTTER Y LAS RELIQUIAS DE LA MUERTE
Rescate de Harry
Poner a salvo a Harry Potter no es moco de pavo, eso lo sabemos todos. Pero aquí, a JK se le fue de las manos con eso de cargarse a sus personajes y… bueno, resulta ser una de las escenas más dinámicas e impresionantes (y dolorosas también).
Godric’s Hollow
“No te fíes de los desconocidos” es algo que nuestra madre nos ha dicho alguna vez a todos. Harry se fía hasta de una serpiente con forma humana. ¡Ay, si se veía venir…! Menos mal que Hermione siempre está ahí, codo con codo, aunque la escena no deja de ser emotiva y ciertamente impactante. Los niños de 11 años de hace 6 películas ya no existen…
Gringotts
Entrar a Gringotts cuando estás en busca y captura para entrar en la cámara de una mortífaga no sé yo si es una buena idea. No obstante, el movimiento que encierra esta escena es digno de, mínimo, un aplauso. Aparte, hay que tener narices para salir montado en un dragón con el premio en la mano. Se ve que Harry les cogió gustillo.
“Piertotum Locomotor”
Ver feliz y empoderada a Minerva es algo de lo que no hay. Y ver el comienzo de la batalla más épica con figuras gigantes de piedra cayendo de los muros del castillo nos pone los pelos de punta. ¿O no? Gracias, McGonagall.
Muerte de Snape
Nada es lo que parece. Y, efectivamente, no lo era. A nivel emocional, esta es una de las escenas más tensas, sufridas y conmovedoras de toda la saga. El amor que sentía Snape por Lily Potter como para jurar proteger a su hijo ante todo. Always.
“A mi hija no, arpía”
El gustazo que da esta escena no tiene palabras. Pese a que Bellatrix es un personaje de los más queridos de la saga, sobre todo por la brutal interpretación de Helena Bonham Carter, el amor de una madre sobrepasa cualquier cosa, y Molly está que se sale en este momentazo.
ANIMALES FANTÁSTICOS Y DÓNDE ENCONTRARLOS
Trascendiendo de nuestra queridísima saga, nos volvemos a los años 20 con nuestro adorado magizoólogo Newt Scamander. El comienzo de esta saga de películas nos regresa al pasado, en el que también un poderoso mago se quería hacer con el control del mundo y, pese a que la esencia y el estilo de Harry Potter permanece, no deja de ser una ampliación de la visión que teníamos hasta ahora del mundo mágico.
La maleta de Newt
“No soy tan listo como para inventarme esto”. Y es que menudo panorama el de esa pequeña maleta, es un zoo del mundo mágico. Aunque, si lo pensamos bien, ya hemos visto antes espacios aparentemente pequeños que son majestuosos por dentro. En esta escena, cada criatura tiene su momento concreto, y ya que son ellas las que le dan título a la película, no podría ser menos impresionante la escena en la que se les presentan.
Obscurus y Grindelwald
El momento clímax de la película. Un ser miedoso e incontrolable destruyendo todo a su paso y el mago hasta entonces más peligroso queriéndose hacer con su control. Quizá alguno lo veía venir, pero el “revelio” de Grindelwald es algo que pone los pelos de punta.
La pastelería de Jacob
Podríamos afirmar que Jacob Kowalski es el Ronald Weasley de Animales Fantásticos. Es un personaje gracioso y entrañable y este momento lo demuestra. No es una escena con gran contenido visual a priori, pero sí emocional. ¿Ha funcionado el hechizo desmemorizador? ¿No? Pues nos toca esperar a la segunda entrega para comprobarlo. Lo que es innegable es lo adorables que son los pasteles. Ñam.
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