Benedict Cumberbatch, Dev Patel, Ben Kingsley y Ralph Fiennes protagonizan este relato, basado en la obra homónima de Roald Dahl. Está disponible en Netflix
¡Sentaos, la clase va a comenzar! Se que suena a marcianada que os esté dando una lección este fin de semana. ¡Será rápida e indolora como cuando te sacan una muela! Bueno en realidad es un mal ejemplo. Al meollo, queridos lectores, ¿sabéis lo que es un 'mediometraje'? Si buscáis en el Diccionario de la Real Academia Española, la única acepción la define como "una película con una duración intermedia entre la del corto y la del largometraje". Aproximadamente, entre 45 y 60 minutos, los cineastas cuentan su historia. Pensaréis "¿a qué viene todo esto?". La respuesta viene ahora. ¡Coge papel y boli y apunta!
El aclamado cineasta texano, Wes Anderson, en colaboración con la plataforma streaming Netflix, ha producido cuatro mediometrajes basados en los cuentos del escritor británico Roald Dahl, autor de 'Matilda', 'Charlie y la Fábrica de Chocolate' o 'Las Brujas'. En torno a 40 minutos, el director ha adaptado 'La maravillosa historia de Henry Sugar', inspirada en la vida real de Imdad Khan, un mago pakistaní de la primera década del siglo XX. ¡La realidad hecha ficción!.
'La maravillosa historia de Henry Sugar' cuenta dada la redundancia la historia de Henry Sugar, un hombre adinerado que decide afrontar un reto extraordinario: dominar una habilidad fuera de lo normal para hacer trampas en los juegos de azar. Benedict Cumberbatch, Dev Patel, Ben Kingsley y Ralph Fiennes encabezan el reparto de este relato, cuya crítica va a ser un breve no alegato a favor de él.
Se nota que Wes Anderson es bien conocedor de los cuentos de Dahl y que anteriormente, ya había trabajado con dicho material. Son dos mentes creativas que empastan bien. Este mediometraje es singular, onírico, fantasioso, salpicado por el humor tan característico de las obras del escritor británico. Es una adaptación bien cuidada, pero indiscutiblemente con el sello personal del director de 'La crónica francesa'. Es cine de autor. Pese a esto, no es tan maravillosa como bien indica su título.
Tiene un apartado visual muy andersiano. Uso de colores tono pastel, escenografía muy teatral, de cartón piedra, en consonancia con los cambios de escena, movidos por tramoyistas. Para los amantes de la filmografía del cineasta y del Festival de Sundance, pueden considerarla una obra maestra, pero desde mi percepción, es un poco plana aunque tenga un reparto que es una maravilla, ganadores de Oscars.
Hace un excelente uso de 'la ruptura de la cuarta pared', el hablarle al público, pero abusa mucho de la autodescripción, es decir, que los personajes narran cada escena como si no las estuviéramos viendo ante nuestros ojos. Es un recurso narrativo muy anticlimático, que resulta interesante al principio, pero luego al final te deja con un regusto a ajo, de repetitivo.
'La maravillosa historia de Henry Sugar' tiene un bien escogido reparto y una cuidada estética, pero pese a su corta duración, es muy lenta e incluso soporífera. Si queréis sacar vuestras conclusiones, podéis disfrutar de este relato indie en Netflix. ¡Que vuestro fin de semana sea una autentica maravilla!.