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Cristina Picos, Aliena en ‘Los Pilares de la Tierra, El Musical’: “Mis padres sin ninguna duda son los cimientos que me mantienen con los pies en el suelo. Ellos han sido mi apoyo siempre”



El estreno mundial de este espectáculo, producido por Beon Entertainment y basado en el bestseller del escritor británico, Ken Follet, a partir de noviembre, en el Teatro EDP Gran Vía de Madrid


Después de unos días febriles tan altos como las temperaturas máximas de Murcia, en verano, me di cuenta que el ser humano es pequeño frente a la enfermedad, pero GRANDE ante la vida. Como decía uno de los fundadores del dadaísmo, el franco-alemán Jean Arp, “la catedral es un corazón. La torre, un brote. ¿Has contado los escalones que llevan a la plataforma? Cada noche son más numerosos. Se multiplican”. Secuelas de la fiebre aparte, somos una pila de piedras al nacer. Entre ladrillos y argamasa, crecemos moldeando, tallando y cincelando nuestra forma, nuestra personalidad, es decir, el SER, al igual que hacían antiguamente los constructores de iglesias y templos. La familia, los amigos, las mascotas, las aficiones e incluso la Fe son algunos de los cimientos que nos mantienen con los pies en el suelo. Pilares, que al caer, nos levantan sin pedir nada a cambio. Cristina Picos lo tiene claro. “Mis padres sin ninguna duda. Ellos han sido mi apoyo siempre, mi coherencia y dónde yo acudo cuando se me va la pinza. Por otro lado, la música y el trabajo. El ser humilde con las cosas que hacemos, que es importante, pero nada es tan importante a la vez. Por eso, busco un equilibrio entre esa parte personal y profesional y ser coherente con mis acciones y valores”. Tras estas palabras, no es tan descabellado comparar una persona con un seo porque como señalaba el escritor francés Gustave Flaubert, “un alma se mide por las dimensiones de sus deseos, como se juzga una catedral por la altura de sus campanarios”.


“¡Fue bastante shock! Mantuve el secreto porque forma parte de nuestra profesión. Cuando entras en una producción, te dicen “¡oye de momento es confidencial!” y entonces firmas unos acuerdos. Como mucho, se lo cuentas a tus padres en extranjis y poco más. Estaba tocando el piano en casa cuando me llamó Lorena de Recursos Humanos y pensé “¿Es esto real? Vale, venga, me voy a sentar”. Tras colgar la llamada, lo asimile, salté y lo celebré conmigo misma”, explica esta joven actriz gallega, que tras participar en ‘El Médico, El Musical’ y ‘El Tiempo entre Costuras, El Musical’, comenzará en noviembre una aventura de gran magnitud. El Teatro EDP Gran Vía de Madrid, el lugar para conocer por primera vez a Aliena de Shiring, protagonista de ‘Los Pilares de la Tierra, El Musical’. Producido por Beon Entertainment y basado en el bestseller del escritor británico, Ken Follett, este espectáculo, que dentro de unos meses se estrena a nivel mundial en nuestro país, que son palabras mayores, genera “presión en verdad. Es cierto que ahora estoy en modo trabajar, ensayar, crear, dormir, estudiar y enfrentarse a la intensidad que no soy super consciente de lo que realmente es porque va a ser un evento histórico. ¡Es historia! Intentaremos estar a la altura de las expectativas del público y pondremos toda la carne en el asador”. De acuerdo a Cristina Picos, “honestamente, Beon me cambió la vida y fue un regalo para mí. Cuando me dieron una oportunidad, fue un antes y un después a nivel personal y profesional. Como artista, que una empresa apueste por talento español, espectáculos de aquí, no importados del extranjero, les da mucho valor”.



Al igual que los canales de televisión comienzan a estrenar sus nuevos programas entre los meses de septiembre y octubre, en los teatros es exactamente lo mismo. Llegan adaptaciones de Broadway y West End o de pequeño formato. No es hasta noviembre cuando el público podrá degustar un jamón de pata negra exclusivo. ‘Los Pilares de la Tierra, El Musical’, el ÚNICO espectáculo original con sello español que se podrá ver esta temporada en Madrid. Solamente en España. Ni en Londres ni en Nueva York. En otras ocasiones, he comentado que Beon Entertainment es sinónimo de CALIDAD, no solo por los que están en el escenario sino también detrás de las bambalinas o en los despachos. Se nota el amor y la pasión que transmiten por su profesión, que parece que juegan en otra liga. ¿No lo creéis? Durante la presentación del elenco a los medios de comunicación en la Iglesia Evangélica Alemana, en el patio montaron un mercadillo medieval que te transportaba al Medievo al instante. En la parte interpretativa para estar a la altura no hay que ser un caballero andante sino un deportista de élite. “¡Absolutamente! Yo siempre digo que hacemos este trabajo con dedicación y esfuerzo no solo en las funciones sino también en los ensayos. Al final es una maratón y la voz, tu instrumento que tienes que cuidar. Alimentarte bien, hacer ejercicio, dormir ocho horas, no beber alcohol, llevar una vida activa, la misma disciplina que siguen los que se dedican al deporte”. “Este verano visitamos la catedral de Vitoria, donde hay una escultura de Ken Follett porque parte de su novela se inspiró en ella. Hicimos un tour y fue increíble cómo podías meterte de lleno en la historia. Me enamoré bastante, pero evidentemente siendo de Galicia, siempre tiraré para casa. La de Santiago de Compostela es una de mis favoritas”, bromea por teléfono Cristina Picos que afirma que “aunque suene a cliché, la formación y la constancia marcan la diferencia entre un artista que consigue cosas y el que no. Está genial tener talento y aprovecharlo, pero con él no vas a poder aguantar todo el volumen de carga porque es una carrera que nunca termina, en la que hay que ser constantes, esforzarse y aprender día tras día”.


“Ahora mismo seguimos en proceso de creación. Evidentemente, tenemos que ser fieles al material original y buscar algo que se parezca a lo que el autor realmente quería transmitir. Soy una persona muy sensible en cuanto a la música por eso, para abordar este reto, me fijo en la partitura, “lo que no se dice”, para nutrirme y tirar de ese alma”, recalca la entrevistada que interpreta a Aliena de Shiring en el espectáculo, “un personaje que rompe con los cánones sociales de la época, tiene carácter, es fuerte y es una superviviente. Se podría decir que tiene toques feministas. Lo que más me llamó la atención de ella fue su resiliencia y su capacidad de superarse. Muchas mujeres se sentirán identificadas con ella”. Creada por Ken Follett, “todavía no lo he conocido, pero se que va a pasar y me impone y me genera mucha ilusión”, comparte esta figura literaria con la actriz Teresa Ferrer, que solo tiene palabras de agradecimiento, “alguien que ya admiraba de antes y que tengo la suerte de poder trabajar junto a ella, verla y aprender la una de la otra. Ella es súper generosa con todo, su papel, la información y su talento. Es una tía que se implica y curra muchísimo. Nos motivamos y nos cuidamos en ese aspecto. Está guay porque cada una aporta su personalidad al rol”. No quería dejarme nada en el tintero. Según la intérprete, “mis padres leyeron la novela hace tiempo e incluso disfrutamos la serie en su momento. Ellos me transmitieron el amor por la obra. Honestamente, este año fue cuando me envolvió por completo la historia y descubrí su magnitud y lo imponente que es el proyecto”.



“Literalmente es un espectáculo alucinante o sea de alucinar de verdad. Una escenografía envolvente. No quiero hacer spoilers, pero el público va a percibir olores, van a vernos entre ellos y observará cómo se levanta una catedral, se destruye y se vuelve a construir. Todo ello gracias a un elenco increíble y a que es una obra que solo estará en Madrid y no en Londres ni Nueva York. Para mí solo eso sería motivo suficiente para ir”, así describe Cristina Picos ‘Los Pilares de la Tierra, El Musical’. No os podéis perder el show que va a tocar el cielo de la Gran Vía madrileña. Ultimando los preparativos para su estreno en dos mes, así que pillar las entradas en el Teatro EDP Gran Vía de Madrid antes de que tengáis que soltar todo vuestro diezmo. Noviembre se llenará de amor, ambición, poder, lucha, y Fe y nos recordará que “se muere por una catedral, no por unas piedras”.

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